1.2. Definición de Relativismo lingüístico
La Hipótesis Whorfiana no ha sido
comprobada ya que como dice Wardhaugh (2006: 228) todas las lenguas proveen a
sus hablantes con un sistema para realizar cualquier tipo de observaciones
acerca del mundo.
El relativismo
lingüístico es una versión débil
de la Hipótesis Whorfiana. El relativismo lingüístico nos dice que “la cultura,
a través de la lengua, afecta la manera en la que pensamos acerca del mundo que
nos rodea porque una lengua es la taxonomía del mundo de una cultura...los
significados que las lenguas pueden expresar verían tanto como las culturas”
(m.t.) (Hudson, 1996: 90).
La cosmovisión de una cultura se refleja
en su lengua.
Hay significados que son reflejados en el vocabulario de algunas lenguas pero en
otras no. Por ejemplo, en inglés animales y personas tiene legs (“piernas”), mientras que en español personas tienen “piernas”
y animales tienen “patas”.
Canguros y uálabis son parte importante
del entorno de los indígenas australianos. El Kunwinjku, lengua nativa del
norte de Australia, tiene una terminología específica para referirse a estos
animales (Evans, 1998):
Existen significados conceptuales que
difieren de una lengua a otra. E.g. en español sol es masculino: “el sol”, mientras que en lemán, sol es femenino: “Die Sonne”. En inglés barco es femenino mientras que en
español es masculino.
Hay
significados culturales que la gente prefiere no hablar de ellos (taboo), o si
lo hacen no lo hacen de manera directa (eufemismos). e.g. Centros de
readaptación Social = Cárcel; Hacer el amor= Sexo; Mujer de la vida galante =
Prostituta; Interrupción del embarazo = aborto; Persona con capacidades
diferentes = Discapacitados; Pasado de copas = Borracho, etc.
En tahitiano se usa la misma palabra para “tristeza” y “enfermedad” lo
cual tiene relación con la creencia que la tristeza y la enfermedad son
causadas por el ataque de un espíritu maligno.
“La lengua es una
herramienta poderosa en darle forma al pensamiento....la lengua nativa de cada
quien juega un papel importante en darle forma al pensamiento habitual... pero
no determina completamente al pensamiento en un sentido radical whorfiano (ya
que uno siempre puede aprender una nueva forma de hablar, y con eso, una nueva
forma de pensar)” (m.t.) (Boroditski 2003:919).
1.3. Más ejemplos de diferencias
entre le lenguas
LÉXICAS
Palabras para agujero
en pintupi, lengua nativa de Australia (Crystal, 1987: 15)
GRAMATICALES
“El gato se comió los chocolates” (Ejemplo adaptado de Boroditsky, et al. [2003])
El español especifica el tiempo del verbo.
El mandarín es opcional cuándo el evento ocurrió y no
se marca en el verbo.
El ruso, el verbo incluye el tiempo y si el chocolate
fue comido por un agente femenino o masculino (pero sólo en el pasado) y si el
gato se comió todos los chocolates o solo algunos.
El tuyuca (Colombia y Brasil) (Barnes, 1984)el morfema
del verbo indica si el hablante ha personalmente presenciado el evento, lo ha
oído de alguien más, si lo infiere, o lo asume.
ESPACIO
Términos relativos al espacio:
Español: derecha, izquierda, frente, atrás.
Tseltal: “cuesta arriba” (sur), “cuesta bajo” (norte)
TIEMPO
Mandarín usan metáforas para hablar sobre
el tiempo: shang (arriba) y xia (abajo), en contraste, hablantes del
español usamos metáforas horizontales adelante/atrás. e.g. “Trataremos esto más
adelante”
1.3.1. Categorización del color: una
comparación entre lenguas (adaptado para el español de Sebeok
& Danesi,[ 2000])
1.3.2. La jerarquía del color
(Berlin & Kay, 1969)
Colores Focales:
Los “mejores” ejemplos de un color. Son aprendidos más
fácil por adultos y niños.
Prototipos (Rosch, 1973)
Prototipo = termino base, las características default
de una categoría. e.g. “ave”.
1.3.3. Diferencias gramaticales con respecto a
sustantivos entre Inglés y Maya (Lucy, 1992)
Las diferencias gramaticales entre el maya y el inglés
tienen un efecto en cómo los hablantes tratan las imágenes.
1. Los hablantes del inglés mostraron más atención al
contraste singular/plural que los hablantes del maya.
2. Los hablantes del maya marcaron mucho más la
pluralidad de objetos animados que inanimados. Así que los hablantes del maya
prestaron más atención al número de animales que al número de utensilios. En
contraste, los hablantes del inglés mostraron la misma atención al número de
animales y al número de utensilios.
Por ejemplo: “Al describir una imagen los hablantes del
inglés mencionaron cuantos animales había el mismo número de veces que
mencionaron el número de utensilios pero ignoraron el número de sustancias,
mientras que los hablantes del maya sólo mencionaron el número de utensilios
aproximadamente las mismas veces que mencionaron el número de sustancias.”
(m.t.) (Hudson, 1996)
1.3.4. Traducción entre el inglés y
el español
“Ser/estar” en inglés, “tener” en
español
Verbo “have” (tener) vs. tipo de
comida
1.3.5. Navajo
Los verbos en navajo son
determinados por la forma de los objetos, i.e., si el objeto es largo, corto,
delgado, grueso, redondo, etc.
Los
niños navajo por lo general son más rápidos en aprender a clasificar objetos
por su forma que niños hablantes del inglés.
Los
niños navajo por lo general clasifican objetos por su forma, mientras que los
niños hablantes del inglés lo hacen basándose en el color (Casagrande, 1960).
1.3.6. Las investigaciones
sobre género gramatical y pensamiento de Boroditski, et al (2003).
El género gramatical
y la descripción de objetos (Boroditski, et al. 2003)
Esta investigación muestra cómo el pensar en un objeto está influenciado
por el género gramatical de la lengua nativa del hablante.
El género gramatical y la memoria:
El estudio de Boroditski et al. (2003),
sobre memoria y género gramatical, consistió en asignar nombres masculinos y
femeninos a diferentes objetos (por ejemplo, “Manzana-Patrick”[nombre
masculino]) y se les pidió a los participantes que los recordaran, toda la
prueba fue en inglés [lengua que no tiene género gramatical]. Los resultados
obtenidos fueron, en general, que los participantes recordaron más los objetos
con nombre que le correspondía al género del objeto (por ejemplo, en español,
resultaría más fácil recordar “Manzana-Maria” que “Manana-Juan”. Su experimento muestra cómo la previa
experiencia lingüística de los participantes (en alemán y español) tuvo un
efecto en su habilidad de recordar.
1.4. La relación entre lengua
cultura y pensamiento
“Algunos conceptos culturales, incluidos
algunos de nuestros pensamientos más abstractos, son aprendidos a través de la lengua, por lo tanto la
lengua es un instrumento importante para la socialización. Lo mismo es cierto
para otros patrones de pensamiento más generales, los cuales pueden ser influenciados por patrones gramaticales
de la lengua. Estos conceptos y patrones de pensamiento parecen afectar
nuestro comportamiento, no solamente cuando hablamos sino también cuando
hacemos otras actividades. ...la lengua es sólo un factor que influye nuestro
pensamiento, por lo tanto, hemos rechazado el determinismo lingüístico” (m.t.)
(Hudson, 1996: 105).
Sobre el postulado que dice “la
lengua le da forma al pensamiento”, Slobin (1996) sugiere cambiar “lengua” por
“hablar” y “pensamiento” por “pensar”. Es decir al pensar para hablar nuestros
procesos cognitivos están sujetos a los patrones (cognitivos también) que tiene
la lengua en la que estamos o vamos a hablar (por ejemplo, al hablar inglés no
nos preocupamos que haya concordancia de género al decir “la mesa está rota”.
El género gramatical puede tener un
efecto en el significado.
La lengua no rigen nuestro
pensamiento, por eso hay veces que no podemos explicar algo con palabras. (ver el
video de Steven Pinker hablando sobre el tema https://www.youtube.com/watch?v=UZDeYe93rFg )
Bibliografía
Casagrande, J. B. (1960). The Southwest project in
comparative psycholinguistics: a preliminary report. En Men and cultures, selected papers of the fifth international congress
of athropological and ethnological sciences, F. C. Wallace (ed.).
Philadelphia: University of Pennsylvania Press.
Barnes, J.(1984). Evidentials in the Tuyuca Verb. International Journal of American
Linguistics, No. 50, pp. 255-271.
Berlin, B. & K. Paul (1969).Basic Color
Terms: Their Universality and Evolution. Berkeley: University of California
Press.
Boroditsky, L. (2003a). Linguistic Relativity. En Encyclopedia of Cognitive Science, Nadel, L. (ed.) Londres: MacMillan
Press, pp. 917-921
Boroditsky, L.; Schmidt,
L.; Phillips, W. (2003b), Sex, syntax, and semantics. En Language in mind:
Advances in the study of language and thought, Gentner, D.; Goldin-Meadow,
S., Cambridge, MA:MIT Press, pp. 61–80.
Crystal, D. (1987). The Cambridge encyclopaedia of language. Cambridge: Cambridge
University press.
Ekkerhart, M. (1983). Hopi Time. The Hague: Mouton.
Evans, N. (1998). Aborigins speak a primitive
language. En Language Myths, Bauer, L.
& P. Trudgill (eds.), Londres: Penguin, pp. 159-68.
Fishman, J. A. (1960). A Systematization of the
Whorfian Hypothesis. Behavioral Science, 5: 323–39.
Gumperz, J. J. (1982). Discourse Strategies. Cambridge: Cambridge University press.
Gumperz, J. J& Hymes, D. (eds.) (1964). The
Ethnography of Communication. American
Anthropologist, 66 (6), ppp. 1-186.
Hoijer, H. (1954). Language in Culture. American Anthropology Association Memoir,
No. 79.
Holmes, J. (2008). An introduction to sociolinguistics. Edinburgo: Longman.
Hudson, R. (1996). Sociolinguistics. Cambridge: Cambridge University Press.
Hymes, Dell (1972). On Communicative Competence. En Sociolinguistics: selected readings, Pride,
J. B. and Holmes, J. (eds.). Harmondsworth: Penguin,.
Hymes, Dell (1974). Foundations of Sociolinguistics: an ethnographic approach.
University of Pennsylvania Press, Philadelphia.
Lucy, J. (1992). Grammatical
Categories and Cognition: A Case Study of the Linguistic Relativity Hypothesis.
Cambridge: Cambridge University Press.
Rosch, E.H. (1973) Natural categories. Cognitive
Psychology 4, 328-350.
Sapir, E. (1931). Language and experience. Science, 74.
Sapir, E. (1929). The status of linguistics as a
science. Language, Vol. 5, No. 4, pp.
207-214.
Saville-Troike, Muriel (2003). The Ethnography of Communication: an introduction. 3rd Ed.
Reino Unido: Blackwell.
Sebeok, T. A. & M.
Danesi (2000). The forms of meaning: modeling systems theory and
semiotic analysis.
Berlin: Mouton de Gruyter.
Slobin, D. (1996). From “thought and language” to
“thinking for speaking”. En Rethinking
linguistic relativity, Gumperz, J. J. & Levinson, S. C. (eds.), Cambridge:
Cambridge university press, pp. 70-96.
Wardhaugh, R. (2006). An introduction to sociolinguistics, 5ta. edición. Cornwall:
Blackwell.
Whorf, B. L. (1940). Sience and linguistics. En B.
Carroll, J. (1956), Language, thought and
reality: selected writings of Benjamin Lee Whorf, pp. 207-219, MIT press.
Whorf, B. L. (1936). The
punctual and segmentative aspects of verbs in Hopi. En B. Carroll, J. (1956), Language, thought and reality: selected
writings of Benjamin Lee Whorf, pp. 51-56, MIT press.